Después de varios años en los que la curva fue creciendo, en 2023 las inversiones en el sector del pódcast empezaron a retirarse. Unos lo llaman “corrección del mercado”, otros directamente hablan de “pinchazo de la burbuja”. Lo cierto es que mientras Spotify cancelaba shows y se desprendía del 17% de su plantilla a nivel mundial, instituciones tan prestigiosas como la norteamericana NPR también mandaba a casa al 10% de sus empleados.
Sobre estos movimientos se han escrito análisis de todo tipo. Algunos ponen el foco en la estrategia multimillonaria —y a posteriori errónea— del gigante verde, otros en la dependencia un tanto dañina que se desarrolló a su alrededor. También se han publicado artículos sobre la crisis interna que acompaña la pérdida de audiencia en la radio pública de Estados Unidos.
Hasta ahí, todo números, gráficos y curvas hacia abajo, digo, decreciendo. Pero, ¿qué pasa después? ¿Qué hacen esos productores, guionistas, locutores que ya no tienen donde desarrollarse? Yowei Shaw y Laura Ubaté sufrieron los daños colaterales de ese desencuentro industrial y se quedaron sin su empleo. Más de un año después, están inaugurando un nuevo comienzo como creadoras independientes.
Sobre Yowei Shaw y Proxy
Tras graduarse en Estados Unidos, Yowei trabajó como freelance para producciones como This American Life o Studio 360. Una de sus primeras historias ganó un Third Coast y eso se convirtió en su tarjeta de presentación. Poco después le ofrecieron un puesto en Invisibilia, de la NPR, y estuvo allí trabajando siete años, primero como reportera y después también como coanfitriona. El pódcast fue cancelado en marzo de 2023.
Ahora está al mando de su propio show, Proxy, donde trata de responder preguntas que tienen una base emocional. Podríamos traducir la palabra proxy como apoderado. Lo que Yowei hace es juntar a personas desconocidas entre sí que han tenido una experiencia similar y que, contándosela el uno al otro, se ayudan mutuamente. Por ejemplo, sus primeros tres episodios tratan, precisamente, sobre el desempleo. Yowei junta a una persona que pasó por el mal trago de ser despedido y a una trabajadora de Recursos Humanos. Me gusta mucho cómo indaga en las emociones y cómo consigue que florezcan en algún punto de la conversación. Es un pódcast tremendamente emocionante en su humildad.
Sobre Laura Ubaté y Juventud Maldito Vacío
Laura, de origen colombiano, escribe y produce historias en audio narrativo desde hace años. Empezó en la radio universitaria, después se pasó a la pública y más tarde a la radio online. Ha formado parte de proyectos como Uribe acorralado o Canción Exploder y creó el pódcast Viajes inmóviles en plena pandemia.
Esta semana Laura ha estrenado Juventud Maldito Vacío, un proyecto muy personal al que lleva años dándole vueltas y que trata sobre una chica que persigue su sueño adolescente. Esa chica es ella y su gran aspiración era llegar a ser una DJ de radio. Su propia historia le servirá para hablar de esa franja de tiempo, entre los 20 y los 30 años, cuando las metas se mezclan con las expectativas, los obstáculos y la realidad más terrenal. En el primer episodio ya queda probada la capacidad de Laura para narrar y el cuidado que le han puesto al diseño sonoro. Dan ganas de seguir descubriendo cómo evolucionarán estas memorias de juventud.
Hablé con Yowei y con Laura por separado, pero he editado la conversación para presentarla como diálogo.
Laura, tú te has referido al 2023 como “el año de la caída de un héroe llamado Industria del pódcast”. La retirada de inversiones en el sector os afectó a ambas al quedaros sin trabajo pero también ha sido un punto de inflexión en la carrera de las dos a nivel creativo. ¿Qué supuso ese cambio?
Laura: A lo largo de estos años he producido para muchas personas, siempre he sido conocida como la “productora de…”, “la locutora de…”, “la organizadora de…”. Pero en 2023 terminé mi contrato en un trabajo de pódcast que además adoraba y con un equipo espectacular. Fue entonces cuando empecé a preguntarme quién era yo fuera de una marca, fuera de una organización.
En ese parón pude reflexionar sobre cuáles son los proyectos que quiero hacer y por qué los quiero hacer, cómo redefinir mi relación con la creatividad a través de mi newsletter, y cuáles son mis valores como periodista, como productora, incluso como artista. Y esto lo digo desde un lugar muy sincero porque hay cosas que hago desde mi posición de periodista y creo que hay cosas que puedo hacer desde una visión personal, conceptual. Una visión artística.
Yowei: El tema de los despidos en el periodismo es prácticamente un rito de iniciación. En mi caso desde NPR nos dijeron que un 10% de la plantilla sería despedida y que nos comunicarían los nombres al cabo de un mes. Racionalmente sabía que era una posibilidad, pero cuando ocurrió fue muy doloroso. Y eso que dentro de lo que cabe me despidieron en buenas condiciones: me aseguraron que no era por mi rendimiento sino por una decisión empresarial, tuve una indemnización gracias a nuestro sindicato, tengo ahorros, no tengo hijos, ya acumulo años de experiencia en esta industria… Pero entonces, ¿por qué dolía tanto? Vi que era un fenómeno más amplio y que afectaba a mucha gente. Se convirtió en una especie de misterio para mí y en el punto de partida de mi nuevo proyecto. Quería informar sobre ello, intelectualizarlo de algún modo.
Después de estar años trabajando para otros, me crea mucha curiosidad cómo disteis el paso de apostar por vuestro proyecto, vuestra intuición. A veces no es fácil validar las ideas de una misma…
Yowei: Cuando era freelance ya había coqueteado con la idea de crear mi propio pódcast, pero siempre que una persona se me acercaba para proponerme crear algo me quedaba aterrorizada. “¿Quién? ¿Yo?!”. Era como si no tuviera nada que decir… Realmente no tenía la confianza y tampoco tenía la experiencia.
Ahora ya me siento más segura, capaz de darle forma a una historia, de encontrarla, aunque en el proceso haya momentos difíciles. En cuanto a los temas, en Invisibilia nos animaban mucho a presentar nuestras propias ideas. Eso me ayudó a desarrollar mi confianza, también me permitió crear mi propio estilo y darme cuenta de que me gusta empezar a informar desde un punto de vista emocional. Capto una sensación o una inquietud e intento entender de dónde viene eso, cuál es la pregunta subyacente.
Aun así el proceso no fue muy sencillo, era una especie de ping pong: “¡Puedo hacerlo!” “No, necesito un trabajo” “¡Puedo hacerlo” “No, no tienes nada que decir”. Hasta que un día simplemente me comprometí y me puse manos a la obra. Cuando estás creando, ahí ya no tienes sentimientos de ansiedad ni dudas sobre ti misma. Estás a la caza, intentado resolver el puzle y eso es divertido.
Laura: Yo creo que la gran lucha de cualquier mujer es darse valor a sí misma a lo largo de la vida. Como una periodista joven, pienso que al principio mi validación era “Ah, ok, puedo llevar a cabo un cargo y la gente confía en mí para ello”. También he pensado mucho sobre cómo la validación que tratamos de conseguir las mujeres es a través de la excelencia (un premio, dosis de influencia…).
Pero en el momento en el que entro a trabajar en un ambiente periodístico veo que la sobreexplotación es normal, que la gente se enferme por trabajar demasiadas horas es algo normal, hay unas fallas importantes de liderazgo y además hay una jerarquía súper marcada entre quien habla ante el micrófono y quien no habla ante micrófono. Démonos cuenta de que las mujeres están muy presentes en la industria del pódcast pero generalmente en roles de productora, asistente, organizadora… Es un sistema de poder. De esto yo me di cuenta una vez que salí de ahí.
Durante esta pausa, y gracias a tantas compañeras con las que he hablado, me di cuenta que la validación verdadera viene de adentro, decir “yo me doy valor por lo que yo soy, sin necesidad de un trabajo o de un premio o de la aprobación externa, especialmente la evaluación de personas que tienen más poder que yo”. Es cuando ya hice mi grito de independencia y dije “ok, voy a poner allí afuera las cosas en las que yo creo como Laura”.
Vuestros proyectos no encajan en la visión más convencional del pódcast narrativo. No sé si ha sido de manera planificada o no, pero os habéis alejado de la fórmula más clásica… ¿Cómo habéis experimentado con el formato?
Laura: JMV es una historia basada en hechos reales, seis episodios, formato memoir. Es un pódcast conceptual sobre esa brecha, ese vacío que se abre entre lo que tú sueñas ser y en lo que te conviertes. Cuando digo pódcast conceptual, pienso en el terreno musical cuando se habla de la diferencia entre un álbum normal y un álbum conceptual. En este pódcast quiero que todos los episodios estén imbricados. Más allá del audio, tendrá otros componentes, la idea es crear un universo expandido a su alrededor.
Yowei: En mi caso se juntan dos factores. Por un lado, me agoté un poco del formato largo, tanto como creadora como oyente. Y por otro, trabajando en mi anterior puesto pude comprobar que una conversación también puede contener un arco dramático con giros y con una gran fuerza emocional. Me acuerdo de los episodios que hicimos con Esther Perel y con un humorista que tenía miedo al poder. Apostar por esa fórmula de charla narrativa pone mucha presión en la búsqueda de las personas adecuadas, en escribir el conjunto correcto de preguntas para la entrevista, también sobre ti como entrevistadora y sobre todos los presentes en la sala que facilitan que pueda producirse ese baile. Pero descubrir cómo hacerlo bien está siendo un desafío creativo interesante.
¿Qué habéis puesto en práctica en este pódcast que es consecuencia de todo vuestra experiencia en audio? Y al revés: ¿qué nuevo recurso diríais que estáis adquiriendo al producirlo así, por vuestra cuenta?
Yowei: Gracias a Invisibilia aprendí a reportear sobre conceptos y ciencia, también aprendí a sentirme cómoda haciendo que una historia larga funcione y sea efectiva. Cuando escribes, cuando produces, cuando incorporas el diseño de sonido… No es algo que domine, todavía me queda por aprender, pero sí, ya me siento cómoda haciéndolo.
En cuanto a cosas nuevas, diría que descubrir el arte de la conversación entre dos y el arte de la charla narrativa. Siempre he sido una periodista generalista, no especializada en nada en concreto, y con Proxy estoy viendo la oportunidad de profundizar en un área más delimitada: las emociones. Me gusta presentarme como una periodista de investigación emocional.
Laura: En mi caso la respuesta es una mezcla de experiencia y experimentación. La exploración en los meses previos a hacer JMD tuvo que ver con recorrer todos los formatos que yo había hecho antes. Sin ese conocimiento no podría haber tomado la decisión de que este nuevo pódcast no era ninguno de ellos (ni conversacional, ni de investigación, ni true crime…) y finalmente decantarme por una memoria. Además, gracias a mi experiencia previa puedo escuchar un buen pedazo de audio y saber si es tape o no es tape, si las escenas están funcionando, si hay una tensión, si estoy haciendo lo suficiente por demostrar por qué esto merece la pena ser escuchado.
Y algo nuevo que he podido aprender gracias a mi equipo actual es que el concepto se expresa a través de la narrativa pero también de todo lo asociado a ella: la animación, la ilustración, el diseño de sonido, la música… Rodearme de todas esas disciplinas me ha servido para lanzarme a crear un episodio narrativo al 100% y luego un episodio que va a ser un poema.
¿Cómo afrontáis el reto de destacar en todo el océano de novedades? Empezar desde cero también significa encontrar oyentes y fidelizarlos...
Laura: Estoy pensando distribuir el pódcast por YouTube, quiero llegar a otra generación. Desde el principio también contemplo un componente de show en vivo. Estamos preparando un montón de cosas para poder abrir el concepto a los demás. De todos modos, yo no creo en esto de crear mi nicho. Yo creo que el nicho ya existe, solo tengo que encontrar a estas personas que ya están resonando con algo que para mí es importante.
Yowei: Esta es la pregunta del millón de dólares porque en Proxy no tenemos un presupuesto de marketing ni formamos parte de una red mayor de pódcast. Primero, estoy intentando hacer periodismo útil y entretenido para asegurarme de que el producto final merezca la atención de la gente. Después, estoy siguiendo todos los pasos que se recomiendan: feed drops, promociones cruzadas con otros pódcast más grandes, atraer a invitados, mandar un kit de prensa, estar activos en redes sociales… Estoy pudiendo tener un diálogo estrecho con los oyentes, en el show pero también en la cuenta de Patreon. Cada persona que se suma se siente como una victoria.
¿Qué os viene a la cabeza si os pregunto por el futuro del sector? Lo que pasará en los próximos meses en este ecosistema al que habéis entrado a formar como creadoras independientes…
Yowei: Cuando trabaja en Invisibilia no prestaba atención a las tendencias del negocio, lo cierto es que no tenía que hacerlo. Ahora mismo estoy en mi pequeño mundo intentando mantenerme a flote. Sí tengo claro que el formato largo tradicional requiere de muchos recursos, habilidades y experiencia, tantos que aunque yo quisiera seguir haciéndolo no podría conseguirlo por mi cuenta. Al igual que yo he tenido que adaptarme a raíz de perder mi trabajo, creo que muchos de mis compañeros también tendrán que hacerlo. Me siento un poco nerviosa diciéndolo, pero es lo que pienso… Sin embargo, experimentar nuevos formatos más cercanos al conversacional o a lo que llamamos light lift también puede ser muy divertido y satisfactorio.
Laura: Desde la pandemia hubo una explosión de la producción que ha continuado. Creo que cada vez habrá más producción de videopódcast y después de eso vendrá una desaceleración. Ya estamos ahí, en un momento de escasez. Venimos desde 2020 preguntándonos cómo podemos hacer dinero y esa respuesta solo se va a ir contestando si somos nosotras mismas, las profesionales de la industria, quienes encontramos la forma de hacer que el negocio funcione. Es una labor colectiva porque el entusiasmo con el que tú sales a hacer tu proyecto personal es una moneda que se agota. Tenemos que encontrar la forma en que seamos vistos y vistas como una industria igual de grande y próspera que la del vídeo. Ojalá en los próximos meses ver más profesionales entendiendo el business y más marcas confiando en el desarrollo independiente para posicionar sus objetivos.
Una ronda relámpago
Cada tres años se produce el mismo efecto: Sally Rooney saca nuevo libro y todos nos ponemos como locos. Los fans y los críticos. Si no has leído ninguna de sus novelas, ahí va una buena introducción: How Sally Rooney became the voice of a generation. Si ya eres un lector avanzado, por aquí bucean en todo su universo: Sally Rooney's Beautiful Deceptions. Y si la quieres escuchar directamente a ella, qué mejor que una entrevista: Sally Rooney Thinks Career Growth Is Overrated.
Sé que es todo un monográfico, pero ¿cómo se lo vamos a negar a la persona que nos dio Normal People?
La nueva temporada de Grandes Infelices comenzará el 29 de octubre, pero han publicado un episodio especial donde Javier Peña anuncia el lanzamiento de un libro escrito a raíz de este pódcast.
Más novedades: desde Libros del KO anuncian que estrenarán su propio programa y ya tienen mi atención.
Esta semana se ha desvelado la programación de la quinta edición de Podcast Days que se celebrará el 17 y 18 de octubre en Madrid. En el acto de presentación, Carmen Páez, representante del Ministerio de Cultura, anunció que pronto se convocará una nueva línea de ayudas para la creación de pódcast.
¿Buscas sonidos? La librería de la BBC, con más de 33.000 efectos, ya es de acceso gratuito.
Esto no es un pódcast, pero empieza con lo oído en unas cintas de casete: The Divorce Tapes, un artículo de The Cut.
¡Hasta la próxima!
Andrea
Buenas, tenia el de Proxy en la lista pero con tu lectura lo he pasado a primera posición y del tirón me he escuchado los tres primeros. Me ha gustado mucho porque además conozco casos como el de Elliot en España, despidos así, ven al despacho, estás fuera y no puedes volver a tu mesa ni a recoger la foto de tus hijas en la mesa... Seguiré escuchando a ver si el resto de la temporada funciona igual porque estos tres son más narrativos que conversacionales.
Me ha encantado que hayas hablado con Laura y Yowei sobre cómo sacaron adelante sus proyectos más personales después de haber sufrido los sinsabores de un despido en sus trabajos soñados... y que compartan su visión sobre la industria del podcast que muchas veces parece poco amable.